Para esta edición de la sección Casos de Éxito, entrevistamos a Manuel Núñez, Managing Partner de Belth Capital Partners y voluntario en la Comisión de Empresarios Jóvenes de CAINTRA, quien –con su vasta experiencia teórica y práctica– nos compartió información importante sobre el sector de emprendedores en Nuevo León.
Manuel Núñez es egresado de la licenciatura en Contaduría Pública y Finanzas por el ITESM, un diplomado en crowdfunding y Fintech por la Universidad Anáhuac y un MBA por la EGADE Business School del ITESM y demás estudios de posgrado en materia de Startup Nation por el Technion Israel Institute of Technology. Colaboró por más de 13 años en EY, una de las cuatro firmas de consultoría y auditoría más importantes a escala global, en el área de Impuestos con experiencia en fusiones y adquisiciones, diseño y asistencia de planeación financiera y fiscal, modelaje, inversiones y reestructuración. Durante su MBA en la EGADE Business School del Tecnológico de Monterrey, Núñez se interesó por los search funds, un modelo de emprendimiento mediante adquisición que se volvería crucial en su carrera. Durante el curso de su MBA, Núñez coincidió con otros jóvenes como él, con los que formaría, en 2021, la sociedad Belth Capital Partners. Además, es socio en Ascendis Partners, una aceleradora de search funds, que busca apoyar a 4 emprendedores durante la búsqueda y selección de negocios.
Con la experiencia que ha ganado gracias a su educación y participación como consultor en una de las Big Four, Núñez nos platica sobre la trayectoria de su empresa y nos da su perspectiva en cuanto al panorama del ecosistema emprendedor en Nuevo León.
La historia detrás de Belth Capital Partners Belth Capital Partners es un search fund ubicado en San Pedro Garza García. Su principal objetivo abarca la búsqueda en adquisición de empresas, la valuación de éstas, el levantamiento de capital, la gestión del negocio y estrategias de crecimiento acelerado por medio de adquisiciones o fusiones. Entre los sectores a los que brinda mayor interes se encuentran el tecnológico, servicios B2B, educativo, de empaques, healthcare y wellness. Como search fund, Belth Capital Partners recaba, de dos a seis meses, el capital necesario para comenzar la búsqueda de empresas. Luego, en un periodo de uno a 30 meses, ubica negocios en el noreste de México que cuenten con una trayectoria rentable, con capacidad de crecimiento y que sean relevantes en las industrias mencionadas; mientras tanto, busca obtener el capital para adquirirlas y cerrar la transacción. Posteriormente, opera estos negocios de tres a cinco años con su metodología de generación de valor Beanstalk, que combina elementos como la transformación digital, la generación de eficiencias operativas, el apalancamiento financiero y la innovación en el modelo de negocio. Esta metodología le permite obtener valor de manera eficiente para hacer crecer estas empresas y, finalmente, poderlas vender a un comprador estrátegico o inversionista institucional.
Belth Capital Partners lleva un año operando, por lo que aún se encuentra en la etapa de recaudación de capital y búsqueda de empresas. “Hemos buscado empresas que cumplan con [cierta] cantidad de requisitos: llámese ventas desde 100 hasta 350 millones de pesos, que tengan márgenes de rentabilidad sanos, que tengan ventas que han crecido en los últimos tres años y, sobre todo, que el dueño esté motivado a vender, ya sea porque se quiera retirar, esté cansado o no tenga un plan de sucesión y eso fomente que la transacción sea más viable”, cuenta. Hasta ahora ha localizado más de 80 empresas con potencial de compra, ha presentado cartas de iniciación en diversos procesos y está cada vez más cerca de cerrar sus primeras transacciones.
Panorama del sector emprendedor en Nuevo León
La visión del nuevo gobierno de Nuevo León es convertir al estado en una especie de Silicon Valley al atraer inversión extranjera directa orientada a sectores de inteligencia artificial, IoT, ciencia de datos, ciberseguridad y automóviles eléctricos. Si bien varias industrias del sector tecnológico ya venían creciendo de forma acelerada, Núñez cuenta que la pandemia por Covid-19 ayudó a estimular aún más su crecimiento, lo que dio origen a los unicornios, es decir, empresas con valuaciones por encima de 1,000 millones de dólares, como Kavak, Clip, Bitso y Konfío.
En Nuevo León hay actualmente 17 fondos de inversión y gestión de recursos de capital de riesgo (venture capital) en sus diversas etapas: pre-semilla, que presenta inversiones desde 100 000 a 250 000 dólares; semilla, con inversiones de hasta uno o 1.5 millones de dólares; etapa de crecimiento, con inversiones desde 2.5 millones hasta 10 millones de dólares y, por último, la etapa de aceleración, con inversiones de cientos de millones de dólares. En su columna “Qué necesita Nuevo León para crecer”, publicada en diciembre de 2021 en Transforma, Núñez asegura que estos fondos han invertido, en al menos 52 transacciones, un total de 68 millones de dólares. Sin embargo, estas transacciones sólo representan 2.3 % del total de la inversión en México de venture capital, por 2 944 millones de dólares.
De acuerdo con Núñez, las categorías más beneficiadas en los procesos de inversión son, por su escalabilidad, las relaciona das con tecnología. De ahí que las fintech sean las más favorecidas, con al menos 880 millones de dólares invertidos hasta febrero de 2021, seguidas de las empresas tecnológicas de consumo y de las health techs.
No obstante, Núñez asegura que para que Nuevo León aspire a un boom como el que ocurrió en Silicon Valley debería fomentar una red de inversionistas, buscar más fondos de capital privado, hacer participar a corporativos y universidades, y, finalmente, atraer a emprendedores. “Debe haber una conversación para que realmente se atraiga a estos inversionistas. Que puedan esperar que estas empresas crezcan de forma acelerada, que sí estén dándole ese feedback y que los emprendedores se convenzan de que aquí es el mejor lugar para empezar”, afirma.
Por ello, considera más viable seguir los pasos de Israel, un país que apostó por una participación en los sectores de alta tecnología y la cooperación conjunta entre la academia, los inversionistas y los sectores público y privado, y que hoy tiene más de 11 000 start-ups que aportan 15 % de su PIB. Ha contado hasta ahora con inversiones por arriba de 18 000 millones de dólares y alcanza más de 40% de las exportaciones, además de que, por cada dos personas que colaboran en el sector de tecnologías emergentes, se producen al menos dos empleos en empresas de software y otros tres en empresas del sector industrial. “Si vemos todo el contexto de estas industrias, cómo permean en la economía estatal, es grandísimo el efecto. No sólo en términos de capital, sino en términos de empleos”, señala.
Para Núñez, Nuevo León cuenta con todos los elementos que le han dado éxito a Israel: talento, educación y empresas multinacionales; sin embargo, en su columna “Qué necesita Nuevo León para crecer” recalca que “se necesita más capital tanto de inversionistas privados como del propio gobierno para poder crecer según las dimensiones necesarias que requieren los problemas actuales”.
Núñez en la Comisión de Jóvenes Emprendedores de CAINTRA
Núñez considera que el tema de apoyo a las pymes es el punto más relevante en la agenda de la Comisión de Jóvenes Emprendedores de CAINTRA. Asegura que, si bien es posible buscar inversiones, lo que se necesita, en primera instancia, es “dinero para crecer”. No habla sólo de un apoyo inicial, sino de uno que permita a las empresas “desarrollar su producto, ponerlo en el mercado, llegar a otras geografías y crecer de forma exponencial y acelerada”.
El artículo 14 de la Ley de Fomento a las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas de Nuevo León, reformado en 2020, establece que debe destinarse al menos 1% del total del presupuesto para un fondo de apoyo (financiamiento) a las mipymes (aceleradoras e incubadoras). De acuerdo con Núñez, en lo que va del presupuesto de 2020 a 2021 se han erogado sólo 142 millones de pesos, de los 600 a 980 millones que podrían destinarse a este fondo para las MIPYMES “que tanto lo han necesitado y que en la pandemia requieren este tipo de ayuda”.
Núñez se convirtió en miembro de la Comisión de Jóvenes Emprendedores de CAINTRA en 2021. Su motivación es precisamente buscar que esta iniciativa sea ejecutada. “Pensamos que como comisión somos el reflejo, la voz de los que estamos viviendo en el mercado”, dice. De ahí la importancia de que esta comisión fomente temas de inversión e impulso a las start-ups, pues cuenta con “la energía, el talento y las ganas para llevarlo a cabo”. Núñez asegura que en la actualidad, al haber entrado un gobierno joven al estado, son los mismos jóvenes emprendedores los que deben participar en y encauzar estas iniciativas.
Por SILVIA SÁNCHEZ DE LA BARQUERA